Las etiquetas de envío son uno de los elementos más importantes dentro de la logística de transporte y mensajería. Aunque a simple vista parezca un simple adhesivo con códigos y direcciones, su papel es fundamental para que los paquetes lleguen correctamente a su destino.
Índice
¿Qué es una etiqueta de envío?
Una etiqueta de envío es un documento impreso, generalmente en formato adhesivo, que se adhiere al exterior de un paquete, caja, bolsa de seguridad o sobre para identificar su contenido, origen, destino y características de transporte.
Funciona como el “documento de identidad” del envío. Contiene toda la información necesaria para que las empresas transportadoras, los centros de distribución y los puntos de entrega puedan clasificar, rastrear y entregar correctamente el paquete.
Las etiquetas suelen generarse automáticamente desde plataformas logísticas, software de e-commerce o servicios de transporte como Coordinadora. Cada etiqueta incluye códigos únicos que permiten escanear el envío en cada punto del proceso.
Función principal de la etiqueta de envío
La etiqueta cumple una función esencial dentro de la cadena logística: garantiza la correcta identificación y trazabilidad de los envíos. Entre sus principales objetivos se encuentran:
Identificación del remitente y destinatario: permite conocer quién envía y quién recibe el paquete.
Indicaciones especiales (frágil, perecedero, mantener en posición vertical).
Datos del transportista
Identifican la empresa responsable del traslado y facilitan la trazabilidad interna.
Incluye:
Logo y nombre de la transportadora.
Código interno o número de ruta.
Fecha de recolección y entrega estimada.
Ejemplo de etiqueta de envío completa:
Campo
Ejemplo
Remitente
Juan Pérez – Calle 45 #12-30, Medellín
Destinatario
María Gómez – Carrera 9 #15-22, Bogotá
Teléfono
3104567890
Número de guía
920000112233
Peso
2.5 kg
Servicio
Express 24h
Observaciones
Frágil – No apilar
Código de barras
(Gráfico escaneable)
Transportadora
Coordinadora S.A.
Este formato puede variar, pero mantiene los mismos principios de trazabilidad y clasificación.
Tipos de etiquetas de envío
Las etiquetas pueden clasificarse según su uso, tecnología o alcance geográfico:
Etiquetas nacionales: Se utilizan para envíos dentro del mismo país. Contienen información básica de identificación y trazabilidad.
Etiquetas internacionales: Incluyen información adicional requerida por aduanas, como el país de origen, el contenido del paquete y los documentos de exportación.
Etiquetas con código de barras lineal: Son las más comunes y permiten escaneo rápido en puntos logísticos.
Etiquetas con código QR: Facilitan el acceso a información digital extendida: detalles del envío, facturación o estado del pedido.
Etiquetas RFID (Identificación por radiofrecuencia): Emplean chips que transmiten datos a corta distancia, lo que agiliza la lectura múltiple de varios paquetes simultáneamente.
¿Cómo utilizar correctamente una etiqueta de envío?
Usar una etiqueta correctamente garantiza que el paquete sea procesado y entregado sin contratiempos. Aquí algunos pasos esenciales:
Revisión antes del despacho
Verifica que los nombres del remitente y destinatario, así como sus direcciones, teléfonos y códigos postales, estén correctos y legibles.
Comprueba que el número de guía impreso coincida con el que aparece en la plataforma de la transportadora.
Si notas algún error, corrígelo antes del despacho para evitar que el paquete sea redirigido o devuelto.
Una simple revisión puede prevenir novedades en el envío, especialmente en servicios con alto volumen logístico.
Colocación adecuada
Pega la etiqueta en la parte superior del paquete, en una superficie limpia y plana.
Evita colocarla sobre bordes, cintas adhesivas o zonas arrugadas, ya que esto dificulta el escaneo.
No cubras el código de barras o QR con cinta transparente brillante, pues el reflejo puede impedir su lectura con el lector óptico.
Una etiqueta correctamente adherida garantiza que el paquete sea identificado con rapidez en bodegas y puntos de control.
Protección del contenido
Si el contenido es frágil, agrega señales como “Frágil”, “No voltear” o “Mantener seco”.
En caso de reempaque, retira las etiquetas anteriores para evitar confusión en la entrega.
Conservación del comprobante
Guarda siempre una copia física o digital de la etiqueta y del número de guía. Así podrás rastrear el envío desde la plataforma de la empresa transportadora y comprobar su entrega. En caso de reclamos o novedades, este comprobante sirve como respaldo del envío realizado.
Errores comunes al generar o usar etiquetas de envío
Datos incorrectos o incompletos: omitir números de contacto, códigos postales o escribir direcciones erradas impide la correcta entrega.
Uso de formatos no legibles: etiquetas borrosas o impresas con baja calidad dificultan el escaneo del código de barras.
Colocación inapropiada: pegar la etiqueta sobre dobleces, cinta o esquinas del empaque puede hacer que se desprenda o no se lea.
No actualizar la información del destinatario: cuando el cliente cambia su dirección y no se corrige antes del despacho, el paquete puede ser devuelto.
Reutilizar empaques con etiquetas viejas: genera confusión en los sistemas de clasificación automática.
No conservar el número de guía: impide realizar el seguimiento o gestionar reclamos en caso de incidentes durante el transporte.
Empresas como Coordinadora ofrecen soluciones logísticas integradas con tiendas virtuales, donde Suite Logística permite crear etiquetas, imprimirlas y hacer seguimiento desde un solo lugar y en tiempo real.